By J. Peña, J. Poblete, P. Carrera and C. Argandoña
LA Tercera
May 14, 2011
http://diario.latercera.com/2011/05/14/01/contenido/pais/31-68933-9-ezzati-dice-que-rumores-no-justifican-investigar-a-luis-eugenio-silva.shtml
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Todavía no terminaba el verano cuando el sacerdote Luis Eugenio Silva (70) empezó a mencionar a sus más cercanos que había rumores en torno a que un programa de TV supuestamente estaba investigando a un grupo de sacerdotes, entre los cuales estaría él. El religioso -dijeron ayer fuentes cercanas a éste que pidieron no ser identificadas- dijo que esas pesquisas se relacionaban con la época en que fue rector de los Sagrados Corazones de Manquehue, en los 80. En ese entorno explican que repetía esos comentarios en forma "obsesiva".
El miércoles por la noche, el clérigo y comentarista de televisión (quien atraviesa por una depresión y sufre cáncer a la piel) intentó suicidarse en la cocina de la parroquia La Sagrada Familia de Lo Barnechea: se cortó las muñecas y el cuello y abrió los quemadores de gas.
Ayer fue su segundo día internado en la Clínica UC de San Carlos de Apoquindo. En el recinto informaron que tiene estabilizado su sistema sanguíneo y respiratorio.
Hasta la Unidad de Cuidados Intermedios llegaron políticos, clérigos y amigos, la mayoría de los cuales se entrevistaron con el director médico, Manuel José Irarrázaval. Esto, ya que los siquiatras del recinto resolvieron restringirle las visitas mientras se recupera.
Entre quienes sí pudieron subir hasta el cuarto piso estuvieron el cardenal Jorge Medina (ver nota a la derecha) y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
Este último llegó a las 18.00 y permaneció por media hora en el lugar. Antes de retirarse, se refirió escuetamente a la situación del clérigo. "Vine a visitar a un hermano que está pasando por un momento delicado de salud (...). Les puedo decir que lo he encontrado bien, he podido dialogar con él y espero que pronto pueda salir del hospital".
Ezzati fue consultado por una de las principales conclusiones de la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal de abril: la actualización de los protocolos ante denuncias contra clérigos, en casos de abusos de menores. Las nuevas normas sostienen que se podrá iniciar una investigación previa en caso de "rumores continuos que ameriten el conocer o revisar los antecedentes de la persona, así como también la impresión personal que se puede tener del denunciado si es verificable con otros indicios".
Frente a la pregunta de si abrirá una investigación previa bajo la premisa de versiones continuas, Ezzati declinó abrir una indagación por esta vía. "Si tuviéramos que destacar los rumores, debería estar solamente en eso", afirmó.
Ezzati se retiró sin referirse al llamado telefónico que, sostienen fuentes ligadas a la Iglesia, hizo a Silva horas antes de que éste intentara suicidarse. En ese llamado, sostienen estas fuentes, Ezzati le advirtió que un programa de televisión preparaba una investigación respecto de él.
"No sé qué me pasó", es la frase que ha repetido Silva a quienes lo han visitado, confidencian cercanos.
Seguimiento eclesial
Una de las visitas que recibió Silva pasadas las 14.00 fue la del párroco de la iglesia Madre de la Misericordia de Lo Barnechea, Juan Debesa.
Debesa es licenciado en Historia, al igual que Silva, y ambos son amigos hace décadas.
Además, "la capilla de la que está a cargo Luis Eugenio es filial de la parroquia donde está el padre Juan", explicó ayer el cardenal Medina.
Fuentes eclesiásticas señalan que Debesa es uno de los sacerdotes a quien el Arzobispado encargó hace cerca de 45 días seguir el estado de salud de Silva. Desde aproximadamente este período el presbítero habría comentado, con más énfasis, con su entorno, sobre estos rumores.
Otro de los sacerdotes que han seguido de cerca el proceso de Luis Eugenio Silva es el vicario de la Zona Cordillera, Fernando Vives.
Fuentes eclesiásticas afirman que el vicario (a quien también se ha encomendado la supervisión de la Unión Sacerdotal de El Bosque) ha participado del proceso de orientación a Silva. También fue el encargado de notificar a los demás sacerdotes de la zona oriente de la situación de Silva.
Los primeros en llegar ayer a la clínica fueron los familiares, pero también se presentaron personalidades de la política y del mundo eclesiástico.
El ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, apareció a las 9.10 y tras conversar con los médicos, se refirió a sus años de colegio en los Sagrados Corazones, cuando conoció a Silva siendo rector. "Estuve 10 años en el Colegio Manquehue. Fue una persona que me instó a la poesía, a la música, al dibujo, algo que no era usual en un colegio de barrio alto. Jamás escuché un rumor", dijo.
A las 10.20 se presentó el ex candidato presidencial Arturo Alessandri Besa, quien dijo que a ambos los une una amistad. Sin embargo, tampoco pudo conversar directamente con el presbítero.
Antes de las 11.00 lo visitó el cardenal Medina.
Ya en la tarde se presentó en la clínica el ex candidato presidencial y sacerdote Eugenio Pizarro. Este sostuvo que "cuando uno está en depresión, llega a un punto negro y no es dueño de sí mismo".
Una de las defensas más cerradas del clérigo la realizó el ex juez del caso Pinochet Juan Guzmán Tapia. Ambos -dijo el ex magistrado- se conocieron en la universidad, donde compartieron tres años en la Facultad de Derecho de la Universidad Católica. Guzmán llegó a las 16.10 a la clínica y tampoco pudo reunirse con el religioso.
Antes de retirarse del recinto médico, sostuvo que "si ha habido alguna forma de acusación, yo les puedo asegurar, puedo dar mi mano, que es absolutamente falso, él es un hombre correcto".
Respecto de los motivos que pudo tener Silva para intentar quitarse la vida, dijo: "Yo creo que está con una depresión muy profunda".
Hoy al mediodía se determinará quién será el médico de cabecera del clérigo, quien estaría internado al menos 10 días más por su depresión.
Fiscalía no indaga intento de suicidio de religioso diocesano
Hasta ayer en la tarde, el Ministerio Público no había recibido ningún parte respecto del intento de suicidio del sacerdote, por lo que no se ha iniciado una investigación sobre las circunstancias que rodearon el hecho. Ninguna de las instituciones médicas por donde pasó el religioso ha entregado algún reporte para abrir una indagatoria preliminar.
Se explicó que, usualmente, la fiscalía investiga los suicidios consumados, como una forma de descartar la participación de terceros.
Del mismo modo, se informó que el religioso no presenta ninguna denuncia en su contra, por lo que en estos momentos no hay ninguna investigación en que el clérigo aparezca como indagado.
De acuerdo con las fuentes consultadas, Silva aparece como denunciante en una causa de hace varios años, pero por el extravío de un teléfono celular.
Durante los últimos años, el Ministerio Público ha llevado adelante varias investigaciones en contra de sacerdotes. Una de las últimas fue la seguida al ex párroco de El Bosque Fernando Karadima, denunciado por ex feligreses.
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