Obispo Goic cuestionó tratamiento que arzobispo Ezzati le dio a los casos de abuso sexual en la Iglesia

El Mercurio / Emol.com
July 22, 2018

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El entonces obispo de Rancagua, Alejandro Goic, (a la derecha) y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.

Bishop Goic questioned treatment that Archbishop Ezzati gave to cases of sexual abuse in the Church

"Sometimes I have the impression, perhaps very subjective, that you do not share the criteria of the National Commission on these sensitive issues," he wrote in the middle of the investigation into the Karadima case in 2013.

[See also the article in El Mercurio.]

"A veces tengo la impresión, quizás muy subjetiva, que no compartes los criterios de la Comisión Nacional en estos delicados temas", le escribió en medio de la investigación por el caso Karadima en 2013.

En medio de la investigación que realiza el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, sobre un eventual encubrimiento en casos de abuso sexual cometidos por sacerdotes, se descrubió una carta escrita por el actual obispo emérito Alejandro Goic dirigida al arzobispo Ricardo Ezzati.

El año 2013, cuando se reveló el caso Karadima, Goic oficiaba como obispo de Rancagua y presidente de la Comisión Nacional de Prevención de Abusos. Bajo ese cargo se dirigió al líder de la Iglesia chilena por escrito, en una carta que fue incautada ahora por el Ministerio Público desde el obispado de esa ciudad, y de la que se desconoce si finalmente fue enviada y conocida por Ezzati.

"A veces tengo la impresión, quizás muy subjetiva, que no compartes los criterios de la Comisión Nacional en estos delicados temas. A su vez, miembros de la Comisión manifiestan su disconformidad frente a algunas situaciones que te ha tocado asumir. A mí no me ha sido fácil. Mantener la comunión contigo y respetar y escuchar los juicios críticos de los integrantes requiere un equilibrio complejo. Quizás, es responsabilidad mía, ha faltado provocar un diálogo fraterno, en que, por el amor al Señor y a la Iglesia, conversemos sinceramente y aunemos criterios en materias que han marcado dolorosamente nuestra Iglesia", dice la misiva revelada hoy por El Mercurio.

A través de la exposición de tres puntos en cuestión, el obispo le reprocha al arzobispo que no se le estaba dando la adecuada atención a las víctimas. "Se que han sido injustos, duros, incluso a veces han mentido. Pero nada de aquello les quita la condición de víctimas heridas y dañadas", dijo. Así también le asegura que ya no solo hay que ver estas situaciones como "un pecado gravísimo" sino "también como un delito civil" y que el hecho de no hacerse cargo los pone en situación de "cómplices".