GUADALAJARA (MEXICO)
Mural [Zapopan, Jalisco]
October 5, 2006
By Norma Sánchez
[Via vLex]
Corresponsal
TEPIC.- La Procuraduría General de Justicia de Nayarit envió dos citatorios al sacerdote Nicolás Villarreal Sánchez, acusado de abusar sexualmente de un menor de 11 años, pero el cura no ha acudido.
De acuerdo con el vicario de la Diócesis de Tepic, Jesús Antonio Lerma, el cura se encuentra en Guadalajara atendiéndose un problema de salud desde el sábado pasado, cuando abandonó Nayarit, un día después de ser denunciado.
El menor Manuel G. y su madre, Magdalena G., denunciaron ante el Ministerio Público número uno de Santiago Ixcuintla a Villarreal Sánchez, quien presuntamente tocó los genitales y piernas al niño cuando ambos se encontraban en la sacristía del templo de la comunidad de Amapa, en el Municipio de Santiago Ixcuintla, ubicado a 64 kilómetros al norponiente de Tepic.
El director de Averiguaciones Previas, Rubén Álvarez, informó que hasta ayer no habían podido localizar al sacerdote, quien debe presentarse a declarar en lo inmediato.
“Estamos esperando si se presenta o no, si no se presenta vamos a mandar (una) orden de presentación y localización. Se le mandó el primer citatorio, y el segundo de apercibimiento, y el tercer ya es de localización”, indicó Álvarez.
En caso de que el sacerdote no responda al tercer citatorio, agregó, la Procuraduría General de Justicia girará una orden de presentación en su contra y posteriormente se procedería a su arresto.
El funcionario no precisó cuándo enviarán el tercer citatorio al sacerdote.
Jesús Antonio Lerma, vicario de la Diócesis de Tepic, afirmó que Villarreal Sánchez regresará hoy a Nayarit a enfrentar las acusaciones que se le imputan, pero que se quedará en Tepic en tanto no se aclare el asunto.
“Él ahorita no va para allá para Amapa, las cosas están muy… Aquí la cosa es muy clara. Nosotros no estamos encubriendo nada ni defendiendo al padre, sencillamente estamos esperando, ya esto está en un juzgado (sic).
“Vamos a esperar a que se clarifiquen las cosas y si afortunadamente él es inocente, también vamos a ver qué hacemos para que toda la fama que se le corrió se le recupere. En caso de que desgraciadamente resultara culpable, obviamente tendrá que enfrentar tanto la ley penal como la ley eclesiástica”, expresó Lerma.
Para quien comete el delito de atentados al pudor, el Código Penal para el Estado de Nayarit establece en su artículo 255 que se le debe imponer una sanción de un mes y hasta un año de prisión y multa de tres a 10 días de salario.