SANTIAGO (CHILE)
La Tercera
[Pope Francis sends strong signal about abuse of minors]
January 11, 2018
By A. Tapia and C. Mardones
El Vaticano anunció este miércoles la intervención del Sodalicio, un movimiento laico católico peruano que enfrenta una serie de denuncias de abusos.
En la recta final de la visita del Papa Francisco a Chile y Perú, el Vaticano dio este miércoles una contundente señal contra los abusos sexuales a menores en la Iglesia. En un mensaje que ha calado hondo en Perú, la Santa Sede comunicó que dispuso la intervención del grupo laico católico peruano Sodalicio de Vida Cristiana, cuyo fundador enfrenta denuncias por parte de la justicia limeña por una serie de casos de abusos contra menores.
El anuncio se conoció justo una semana antes del arribo del Pontífice a Perú (18 al 21 de enero) y a días de su llegada a Chile (15 al 18 de enero). El Sodalicio es una sociedad de vida apostólica que depende de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica del Vaticano. En su momento se convirtió en la primera sociedad de vida apostólica laica en ser reconocida por el derecho pontificio.
El Vaticano informó que el comisario apostólico será el obispo de Jericó (Colombia), Noel Antonio Londoño. Los principales cuestionamientos tienen que ver con el rol que tuvo al interior de la institución el fundador del Sodalicio, Luis Fernando Figari, de 70 años y quien actualmente vive confinado en Roma.
[Partial Google Translation: The scandal in Peru exploded thanks to the publication, in October 2015, of the book Half monks, half soldiers, of journalists Pedro Salinas and Paola Ugaz. This text, from the Planeta publishing house, gathers testimonies from 30 former Sodalicio members who denounced having been victims of physical, sexual and psychological abuse carried out by Figari and other leaders of the institution. “We started to investigate in December 2010 and now there are more than 500 cases,” Ugaz told La Tercera.
After the publication of the book, a success of sales in Peru, Sodalicio lamented “the actions and omissions committed by community members” and “we ask for forgiveness (to the victims) and we offer our willingness to listen and help.”
But Figari has never responded for what is incriminated. Already in the same 2015 the Vatican ordered an investigation on Sodalicio, that was in charge of the American cardinal Joseph Tobin. However, the intervention that was known today means, according to analysts, that the Holy See estimates that the movement has been unable to reform itself.]
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